Entradas

Envase de refresco en polvo Tang

Envase de refresco en polvo Tang. 1961. Colección Cuba Material.

En 1961 el gobierno estadounidense envió a Cuba 52 millones de dólares de mercancías como parte de un intercambio acordado con el gobierno cubano, en virtud del cual este debía liberar los 1 113 exiliados cubanos, miembros de la brigada de asalto 2506 que desembarcó en la Ciénaga de Zapata en abril de ese año con la intención de derrocar al gobierno de Fidel Castro, que permanecían en cárceles cubanas desde la derrota de esta fuerza invasora. Uno de los productos canjeados fue el refresco en polvo Tang, cuyo pedigrí político incluía el haber formado parte de la carrera espacial, al integrar la dieta de los cosmonautas estadounidenses.

No más encontré el pomo plástico de tapa anaranjada en la despensa de casa de mi abuela (más llena de pomos vacíos que de comida, en realidad), mi mamá identificó el envase. «Ese pomo es de refresco Tang», me dijo, «uno de los productos que cambiaron por los mercenarios de Playa Girón».

«Lo vendieron en las tiendas», creo que agregó.

En Adios, mi Habana (Verbum, 2017), Anna Veltfort menciona una anécdota parecida, y dibuja un envase de tapa anaranjada similar al que guardaba mi abuela (p. 57).

refresco en polvo Tang

Escena de Adios, mi Habana (Verbum, 2017), de Anna Vetfort, donde se recrea el «descubrimiento», por parte de la autora del refresco en polvo Tang. Imagen tomada del libro.

Tapa del envase de refresco en polvo Tang

Tapa del envase de refresco en polvo Tang. 1962. Colección Cuba Material.